Así cuando este día con mano temblorosa
pongo mi prisma en un registro ambiguo.
Con el sabor extraño de fruto encajonado
antes de consumar la madurez al árbol.
A veces no percibo su llamado
desde mi alada torre de viejo solitario,
pero hay días que siento despertar al sexo
y voy a la hembra, a mendigar un beso;
y sé entonces que jamás besaré el alma
de quien no logre llamarme camarada…
Sé que los perfumes de valores puros
llenarán mi mente de fecundas alas,
sé que dejaré los agnósticos placeres,
de copular ideas sin funciones prácticas.
Sé que el día del combate a muerte
hombros del pueblo apoyarán mis hombros,
que si no veo la total victoria
de la causa porque lucha el pueblo,
será porque caí en la brega
por llevar la idea hasta un fin supremo,
lo sé con la certeza de la fe que nace
quitando del plumaje el cascarón antiguo.
pongo mi prisma en un registro ambiguo.
Con el sabor extraño de fruto encajonado
antes de consumar la madurez al árbol.
A veces no percibo su llamado
desde mi alada torre de viejo solitario,
pero hay días que siento despertar al sexo
y voy a la hembra, a mendigar un beso;
y sé entonces que jamás besaré el alma
de quien no logre llamarme camarada…
Sé que los perfumes de valores puros
llenarán mi mente de fecundas alas,
sé que dejaré los agnósticos placeres,
de copular ideas sin funciones prácticas.
Sé que el día del combate a muerte
hombros del pueblo apoyarán mis hombros,
que si no veo la total victoria
de la causa porque lucha el pueblo,
será porque caí en la brega
por llevar la idea hasta un fin supremo,
lo sé con la certeza de la fe que nace
quitando del plumaje el cascarón antiguo.
Comentarios
Publicar un comentario