PERFECCIÓN, de Clarice Lispector





Lo que me tranquiliza

es que todo lo que existe

existe con absoluta precisión.

Cualquier cosa del tamaño de una cabeza de alfiler

no se desborda ni una fracción de milímetro

más allá del tamaño de una cabeza de alfiler.

Todo lo que existe es de gran precisión.

Lástima que la mayor parte de lo que existe

con esta exactitud

es técnicamente invisible para nosotros.

Lo bueno es que la verdad nos llega

como un sentido secreto de las cosas.

Terminamos adivinando, confundidos,

sobre la perfección.

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